Muslos de pollo a la cerveza
Este
clásico de mi madre no solo es una receta deliciosa, sino que es realmente
rápida de preparar y perfecta para realizar con antelación y dar un golpe de
calor en la olla en el momento en que queramos comenzar a comer.
Ingredientes
para 4 personas:
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Ocho muslos de pollo
sin piel.
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Una cebolla.
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Cuatro zanahorias
grandes.
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200 g de champiñones
frescos o envasados.
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Una lata de cerveza rubia.
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Medio vaso de agua.
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Cinco cucharadas
soperas colmadas de harina.
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Media cucharada de
café de colorante alimenticio.
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Una pastilla de caldo
de pollo, de tipo Avecrem o similar.
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Aceite de oliva.
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Sal y pimienta.
Opcional: A mí me gusta añadir una cucharada de café de
curry, para darle un toque diferente, antes de añadir la cerveza.
Opcional: En caso de no tener cerveza, se puede sustituir
por un vaso y medio de vino blanco (aunque hay que cambiarle el nombre a la
receta, claro).
Procedimiento:
En
una olla express, ponemos aceite de oliva hasta cubrir el fondo y lo calentamos
a fuego medio. Salpimentamos los muslos de pollo y los enharinamos. Sellamos
los muslos de pollo durante un par de minutos, volteándolos a medida que se
doren. Reservamos.
Pelamos
la cebolla y la cortamos en dados pequeños. La añadimos a la olla y la pochamos
durante dos o tres minutos, hasta que se ponga transparente. Pelamos las
zanahorias, las cortamos longitudinalmente en cuatro y las partimos en tacos de
3-4 milímetros de ancho. Las incorporamos a la olla, las dejamos cocinar un par
de minutos y añadimos los champiñones laminados.
Cocinamos
la verdura durante dos o tres minutos, volvemos a poner los muslos de pollo en
la olla y cubrimos con la cerveza y el agua. Añadimos el colorante alimenticio y la pastilla de caldo.
Movemos ligeramente y dejamos evaporar el alcohol un par de minutos.
Tapamos
y ponemos la válvula. Dejamos cocinar durante 20-25 minutos desde que empiece a
sonar la olla.
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